Diseñando para dispositivos móviles
Cuando diseñamos aplicaciones para dispositivos móviles tendremos que pensar en la propia ergonomía del dispositivo móvil. Si diseñamos para iPhone, tendremos que pensar en sus múltiples versiones (iPhone 4, iPhone 5), si diseñamos para Android tendremos que pensar en los miles de dispositivos Android que existen. Si, además, diseñamos para tabletas, tendremos que pensar en un diseño alternativo adaptado para sus tamaños, ya que no es lo mismo un iPad no es un iPhone gigante.
Ergonomía en las apps
¿Cómo utilizará el usuario la app? ¿Con cuantas manos? ¿Y si quiere hacerlo con una sola mano? ¿Le llegará el dedo al botón principal de la app? ¿Tenemos que disponer los botones en otros lugares para que los usuarios puedan acceder con facilidad? ¿El usuario utilizará la app en el tren, en la calle, en el metro, en el sofá, en la cama? Todas estas preguntas, y muchas más, tendremos que hacérnoslas a la hora de plantear un diseño para dispositivos móviles. Diseñar ignorando la realidad del usuario nos llevará a hacer apps imposibles de utilizar.
No sólo tendremos que pensar en la propia ergonomía de nuestra app, sino en la ergonomía de los dispositivos móviles. Una app diseñada para un Samsung Galaxy Mini 2 no será la misma cuando se abra desde un Galaxy Note. La diferencia en el tamaño del dispositivo cambiará por completo la experiencia que tendrá el usuario en nuestra app. No hay una solución absoluta para todo esto, pero son cosas que tendremos que plantearnos.
Dispositivos móviles imposibles de utilizar
Recientemente he leído una entrada en Medium de Zeynep Tukefuci sobre el tamaño de los dispositivos móviles. Explica que se encontraba en una manifestación donde los policías tiraron gas lacrimógeno a los manifestantes. Ella sacó su móvil Google Nexus 4 con rapidez para poder documentarlo, pero se encontró con que el dispositivo era demasiado grande como para poder ser utilizado con una sola mano con facilidad y sin que se cayera al suelo. Ella misma dice:
Increasingly, on the latest versions of the kinds of phones I want to use, I cannot type one-handed. I cannot take a picture one-handed. I can barely scroll one-handed—not very well, though. I can’t unlock my phone one-handed. I can’t even turn on my phone one-handed as my fingers cannot securely wrap around the phone while I push a button with a finger.
I used to be able to do all that on smart phones just a generation ago. Unfortunately, I can’t just use an inferior, older and smaller phone as I do need all the capabilities of the best phones—except their screen size. What I simply do not need or want is that teeny, tiny bit more of screen landscape that comes, for me, the total expense of usability. Yet, I’m increasingly deprived of the choice.
Es decir, no puede teclear con una sola mano, no puede hacer fotos con una sola mano, no puede hacer scroll con una sola mano (significa que no puede ver la mayoría de webs), no puede desbloquear su teléfono con una sola mano y ni siquiera encender su teléfono con una sola mano. Comenta, como podéis leer, que hace unos años sí podía hacer todo esto con los dispositivos móviles que existieron antes de la era de los ‘smartphones’. Ahora no puede debido al tamaño de la pantalla, que incrementa también el tamaño del dispositivo móvil.
Zeynep, además, comenta que ha comprobado que los hombres sí pueden hacer todas estas tareas con sus “grandes” manos. De esta manera, confirma que estos dispositivos móviles han sido diseñados para las manos de los hombres.
I merely want a design that acknowledges that women exist, and women often have smaller hands than men.
Hacer una foto con un iPhone
Siendo yo una chica y teniendo unas manos de un tamaño más o menos estándar, he probado de hacer una foto con rapidez con mi iPhone. Os muestro la experiencia:
Con la mano izquierda utilizando el botón de hacer foto de la interfaz
Con la mano derecha utilizando el botón físico lateral “+”
Vemos que sí que se puede hacer foto con facilidad. ¿Por qué? Por varios motivos:
- El dispositivo puede cogerse con una sola mano bien sin peligro de que se caiga.
- La interfaz del iPhone permite hacer una foto rápido sin tener que desbloquear el teléfono
- El botón de hacer foto se encuentra en la parte inferior de la interfaz, siendo así más accesible para el dedo. Si se encontrara en la parte superior, no se podría llegar
- El botón de hacer foto a través de la interfaz sigue apareciendo en la parte inferior, siendo de fácil acceso para el dedo que queda libre (el dedo pulgar)
- El botón físico de hacer foto (el + o el - del volumen) está accesible para los dedos que sujetan el móvil
- La cámara se encuentra en un lugar donde no recibe interferencias visuales por parte de los dedos y la mano
Interfaz diseñada pensando en el usuario
Todos estos puntos (y estoy segura que muchos más) hacen que la experiencia de hacer una foto con el iPhone sea realmente ágil. El usuario no se da cuenta de los obstáculos que podría llegar a encontrarse para poder hacer la foto (como le pasa a la chica de la entrada). ¿Qué quiere decir esto? Que cuando diseñaron el iPhone lo hicieron pensando en la ergonomía, en el usuario. Cuando diseñamos nuestras apps debemos conformarnos con los dispositivos ya existentes, pero tenemos la oportunidad de hacer la vida más fácil al usuario con una interfaz que esté diseñada pensando en él.