¿Depósito legal en edición digital?
Cuando un editor publica una obra impresa, está obligado a hacer llegar al depósito legal copias del libro publicado. De esta manera, el depósito legal puede encargarse de hacer una recopilación de obras publicadas en todo el estado español a lo largo de la historia. Esta función del depósito legal es realmente útil, ya que sería totalmente imposible reunir en un mismo sitio todas las obras publicadas y, por lo tanto, sería difícil en un futuro hacer estudios sobre las obras publicadas en el pasado, ya que no se dispondría de toda la información.
¿Qué pasa con las obras digitales… es decir, con los libros enriquecidos?
Como dijimos en uno de nuestras anteriores entradas, en las entrañas de un libro enriquecido hay código. El lenguaje real de un libro enriquecido es el código. El libro entero está compuesto por varias carpetas con varios archivos de código y carpetas con los archivos de imágenes, sonido, vídeo… Además, muchos libros enriquecidos se alimentan de contenido externo: feeds, vídeos de youtube, vimeo,… Por lo tanto, ni siquiera en el paquete compilado que convierte todas estos archivos de código, imagen, vídeo, etc. en un archivo único podría llegar a contener todo el contenido que se podrá consultar en el libro.
El reto del depósito legal
El depósito legal, si quiere continuar con su función de recopilar todo libro publicado, debe empezar a intentar recopilar también los libros enriquecidos. Hace unos años empezaron a recopilar las revistas digitales (PDFs), los editores podían enviarlos a través de CDs. Pero, ¿Cómo lo harán para recopilar los libros enriquecidos? ¿Qué querrán que envíen los editores? Nosotros apostamos por la obligación de enviar 3 copias gratuitas (a través de promo codes) del libro final, publicado. Pero para ello el depósito legal tendrá la obligación de disponer de los dispositivos de lectura de estos libros enriquecidos: iPad, iPhone, Android… ¿Y qué pasa con las actualizaciones? Ya hablamos también en otra entrada de la diferencia entre una segunda edición y una segunda versión; el depósito legal debería intentar tener todas las versiones de todos los libros enriquecidos, ¿pero cómo hacerlo si al actualizar las aplicaciones se borra la versión anterior? Son muchas cuestiones aún por resolver.
Lo que los editores digitales no estarán dispuestos a ceder
Los editores digitales no estarán dispuestos a ceder el código con el que se ha hecho el libro. El código, en este nuevo modelo de negocio digital, es la base con la que se pueden construir otros libros. Es como ceder los medios de producción y también la fuerza de producción: es ceder los planos de la imprenta que imprime y ceder también la máquina que imprime.