Por qué el PDF no es una opción viable para las publicaciones interactivas
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Cuando publicamos Tusk, libro de fotografía para iPad, hace ya casi un año teníamos la necesidad de explicarle a todo el mundo que Tusk no era un simple PDF: Tusk era un programa desarrollado con código. La gente no entendía esto. Recuerdo que solían compartir el libro en redes sociales diciendo “Tusk, un ebook… bla, bla”. Y nosotros cuando leíamos eso, pensábamos “¡NO! Otra vez se han confundido, esto no es un simple ebook”.
Nos encantan los PDFs
Nos encantan los PDFs. ¿Cómo podrían no encantarnos? Hemos publicado más de 25 libros impresos, 33 revistas online y 7 revistas impresas usando PDFs. Gracias a este proceso, pudimos entender cómo maquetar un libro, cómo crear una narración a través de la maquetación. Entendimos la secuencia. O la no secuencia (pienso, por ejemplo, en el libro Rayuela de Julio Cortázar y su hipertexto). El libro en si mismo. Qué hace que un libro sea un libro.
¿Revistas y libros interactivos? Vale, entonces sí odiamos los PDFs
Los PDFs son perfectos para versiones impresas de los libros. Pero los PDFs no son aptos para la publicación de libros interactivos-digitales. Te limitan. Limitan a tus lectores. Limitan el libro, la revista. Limitan a la editorial. Limitan a los artistas. Limitan. *(Hace poco publicamos una entrada en el blog sobre cómo las limitaciones de publicar en PDF hizo que Once Magazine, revista digital para iPad, no pudiera sobrevivir y tuviera que cerrar)
La solución más fácil
Para nosotros hubiera sido muy fácil comprar una licencia de Adobe® Publishing Suite y empezar a publicar revistas y libros usando su programa. Hubiera sido un camino natural a seguir. Ya trabajábamos haciendo PDFs. Entonces, si nuestra manera de trabajar era produciendo PDFs… ¿Por qué no aprovechar la oportunidad de convertir esos PDFs en Apps?
Hubiera sido una solución fácil, pero fea. Queríamos crear algo hecho adrede para el iPad y después hecho adrede para el iPhone. Queríamos aprovechar todo lo que estos dispositivos nos podían ofrecer. Queríamos pensar el dispositivo, entenderlo y luego crear algo especial para él. Así es como trabajamos. Contenedor y contenido. Hay una relación entre ellos que no podemos ignorar.
Imprentas
En realidad, tampoco hubiera sido tan fácil. Cuando publicamos libros impresos nosotros maquetamos y diseñamos el libro, enviamos el libro a nuestra imprenta favorita (o la más competente). Elegimos el tamaño, el tipo de papel que queremos para el interior y para la portada, el gramaje… Si nos hubiéramos decidido por las soluciones de Adobe® en el campo de la edición digital, hubiéramos perdido poder de decisión. Adobe® hubiera pasado a ser nuestra imprenta en el campo de la edición digital.. Los únicos. Ellos hubieran tenido el poder de decidir cómo nuestras revistas y nuestros libros tenían que ser. Cómo el usuario tiene que interactuar con las páginas, con el contenido… Los límites de la interactividad.
Tomando el control: yendo más allá
Así que tomamos el control. Construimos nuestra propia ‘imprenta’. Construimos nuestro propio marco de trabajo. Nos construimos a nosotros mismos una casa genial que mejora día a día. Nuestra propia casa. Con nuestras reglas. A nuestra manera.
